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domingo, 4 de agosto de 2024

ABUELA DESCONFIADA.

El abuelo se enamora
de una desconfiada
 Cree que con 65 años
se quedará embarazada.

—Yo quiero hacer el amor
pero con precauciones.
Acércate a la farmacia
Compra unos condones.

Soy muy católica
creo en los milagros.
Me siento muy joven
y me puede pasar algo.

—Sí que sería un milagro.
Para la familia un desastre
A pesar de que los dos
estamos para el arrastre

Eso te pasará eso a ti
yo estoy como una rosa
Seguro que tienes miedo
que no funcione tu cosa.

El hombre a regañadientes
se dirige a la farmacia.
Pedir eso a sus años
no le hace mucha gracia.

Le dice la farmacéutica
¿Cómo los quiere el señor?
Los hay de varios colores
y diferente sabor.

El pobre queda pillado
anta tanta novedad
Los sabores y colores
para el son novedad.

Se los puede llevar rojos.
Sí, está muy enamorado.
Para una simple aventura
los puede llevar morados.

Los prefiero discretos. 
De suaves los colores.
Pasemos por el asunto.
¿Cómo son los de sabores?

Los más vendidos ahora
son menta con chocolate.
Y uno que está petando.
Fabada con aguacate.

Olvidemos los sabores
ella no los va a chupar.
Tiene dentadura postiza
Que le cubre el paladar.

Después de reflexionar
ante tales maravillas.
Le dice a la farmacéutica.
 Los prefiero con varillas.



EL BICHEJO TRAVIESO.

Tiene un hámster de mascota
le da cariño y lo mima.
Un día se le escapa,
a casa de la vecina.

Una mujer mayor,
solitaria y con caprichos
Él un joven inexperto.
Solo sabe cuidar bichos.

Le recibe con cariño.
Está en pelota picada.
Estaba tomando el sol
para seguir bronceada.

Ante esa situación,
el joven queda perplejo.
Tartamudeando dice,
¡Vengo buscar mi conejo!

Un diablillo ese conejo
travieso y aventurero.
Como me pillo desnuda,
se metió en el agujero.

Estaba tomando el sol
me encontraba relajada.
Solo noté unas cosquillas
y no le impedí la entrada. 

Para obligarlo a salir
solo hay una manera.
Quédate en pelotas
y enchufa la manguera.

Enchufo su manguera
el conejo no salía.
 La mujer le comenta,
habrá que usarla más días.

Mueve bien la manguera.
Como si estuvieras regando.
Piensa que sí haces charcos
Se terminará ahogando.

¿Qué conejo tan extraño?
Él no llega a comprender.
¡Que no se muera de hambre!
Y nunca salga a comer.

Tú le metes en la jaula
Allí pasa frío y calor.
Metido en la madriguera
él está mucho mejor.

Él te quiere con locura.
Te ama a su manera.
Se pone muy contento.
Sí. Lo riega tu manguera.

Debemos de tratarle
con amor y cariño.
Necesita de cuidados
Más o menos como un niño.

Sí, vienes a visitarle
de hambre no va a morir.
Mientras le des biberón
no necesita salir.

En lo alto del tejado.
Un gato lo está mirando.
El gato se está relamiendo
Mientras él está regando.

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