Ha pasado más de un año,
dos amigas se encuentran.
Como casi toda mujer.
Sus gorduras se comentan.
Una con cincuenta kilos,
dice, esa es mi meta.
Y su amiga le pregunta,
que le informe de su dieta.
Yo ando por los ochenta,
he seguido varias dietas.
Me resultan muy pesadas,
no consigo esas metas.
Esas dietas muchas veces,
son auténticas paparruchas
A ti te puede engordar.
El jabón con que te duchas.
Hija¡no me digas eso!,
nunca lo hubiera pensado.
Sí, uso hasta una esponja,
me deja el cuerpo raspado.
Tú lee bien el champú,
ese que tiene perfume.
Te advierte claramente,
ahueca y que da volumen.
Huye de los jabones,
y usa limpias vajillas.
Ese quita toda la grasa,
quedas fina y hasta brillas.
Otro que puedes usar,
aunque es un poco fuerte.
Un quita grasa de horno,
ese te vendría de muerte.
Esos quitan la grasa,
hasta la más escondida.
Como a ti te sobra mucha,
te vendría a la medida.
Te agradezco tus consejos,
que me pueden ayudar.
Con tal de perder kilos,
estoy dispuesta a probar.
Como siga sus consejos,
quedará como un diamante.
Sin grasa y con mucho brillo,
lo raro será que aguante.
