Las vacas en el pueblo,
al campo iban a diario,
se llevaban a pastas,
a un lugar comunitario.
Varios chicos y chicas,
nos podíamos juntar,
las vacas pastaban solas,
nos poníamos a jugar.
Las chicas buscaban juncos,
como son más curiosas,
hacían cuerdas para saltar,
cestas y otras cosas.
Los chicos a otros juegos,
como somos más cazurros,
unos a echar peleas,
otros a montar en burros.
Era un peligroso juego,
muy a pesar de eso,
nadie pensaba en caerse,
fracturarse algún hueso.
Aquí interviene el listo,
los demás éramos burros
pide que atemos sus piernas,
bajo la panza del burro.
Para que corriera más,,
se nos ocurrió otra cosa
le metimos bajo el rabo,
una planta espinosa.
Salió a toda pastilla,
sobrevino el fracaso
en vez de caer al suelo,
el se quedo boca abajo.
Su cabeza rebotaba,
como un balón medio inflado,
nosotros nos quedamos,
sorprendidos y asustados.
Al ser la cuerda de juncos
se rompió rapidamente,
el se quedo muy maltrecho,
con la cabeza caliente.
Salieron a buscar el burro,
el cual se había perdido,
y nos prohibieron jugar
a juego tan divertido.
Los chicos a otros juegos,
como somos más cazurros,
unos a echar peleas,
otros a montar en burros.
Era un peligroso juego,
muy a pesar de eso,
nadie pensaba en caerse,
fracturarse algún hueso.
Aquí interviene el listo,
los demás éramos burros
pide que atemos sus piernas,
bajo la panza del burro.
Para que corriera más,,
se nos ocurrió otra cosa
le metimos bajo el rabo,
una planta espinosa.
Salió a toda pastilla,
sobrevino el fracaso
en vez de caer al suelo,
el se quedo boca abajo.
Su cabeza rebotaba,
como un balón medio inflado,
nosotros nos quedamos,
sorprendidos y asustados.
Al ser la cuerda de juncos
se rompió rapidamente,
el se quedo muy maltrecho,
con la cabeza caliente.
Salieron a buscar el burro,
el cual se había perdido,
y nos prohibieron jugar
a juego tan divertido.