de la noche a la mañana,
lo quieren arreglar,,
pasando un fin de semana.
Piensan que lo mejor,
es pasarlo en un hotel,
olvidando las rencillas,
con una luna de miel.
Buscan uno muy alto,
una buena habitación,
por si no pasa la crisis,
y no llega la pasión.
Unas amplias ventanas,
para contemplar el mar,
pues desconfían los dos,
si no llega a funcionar.
Hacen los preparativos,
para el primer intento,
el cuando la ve desnuda,
se viene abajo al momento.
A ella le pasa lo mismo,
al fijarse en el marido,
le ha crecido la tripa,
el aparato encogido.
Empieza lo discusión,
no saben como arreglarlo,
ella llama a recepción,
que vengan a solucionarlo.
En discusión de parejas,
ni estando en luna de miel,
son cosas particulares,
nunca interviene el hotel.
-En eso no estoy de acuerdo,
créame que yo no miento,
si la ventana no abre,
culpa es del mantenimiento.
culpa es del mantenimiento.
Tomo una decisión mi marido,
que estoy dispuesta apoyar,
si no abre la ventana,
el no se puede tirar.
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