josegelado.blogspot.com

martes, 19 de febrero de 2019

LA LAVADORA.


Pasear con la mujer,
le parece un disparate.
Pues se le queda parada,
en cualquier escaparate.

¡Qué vestido tan bonito!,
Para lucir por la calle.
Me lo podías comprar,
ten una vez un detalle.

—Te sentaría bien de joven,
no puedes lucirlo ahora.
Tienes un tipo cuadrado,
el tipo de lavadora.

Uno de lencería,
se queda pegada al suelo,
Mira y remira las prendas,
son todas para modelos.

Ese sostén y esas bragas,
mira que cosa tan cuca,
—Esa prenda tan pequeña, 
no te tapa la peluca.

Esas botas tan bonitas,
que se cierran con corchetes.
—No ves que son estrechas,
  no entrarán tus juanetes.

Ya metidos en la cama,
la empieza a sobetear.
—Aparta tus manos de mí
que no estoy para lavar.

—Menos para un pingajo,
arrugado y muy enano.
Te vas al cuarto de baño,
y te lo lavas a mano.






No hay comentarios:

Publicar un comentario

Entrada destacada

USANDO EL APARATO.

  ¡Qué bien te veo, María! Desde que quedaste viuda. Estás mucho más alegre y sin cara de amargura. Llevas toda la razón mi marido era un ga...