INOCENTE CONFUSIÓN.

Yo estaba de patrona,

llegaba tarde a dormir.
 Sin encender la luz,
me podía confundir.

En la habitación de al lado,
dormía una chica muy mona.
Yo estaba loco por ella,
era la hija la patrona.

Con todo tan oscuro,
llegue a esta conclusión
  Yo nunca cierro con llave,
esta es mi habitación,

Me desnudo despacito,
y con la luz apagada.
Al meterme en la cama
resulta que está ocupada.

¡¡¡Es la hija de los patrones!!!
está a mí, disposición.
Ni en sueños pensé yo,
el tocar ese bombón.

Empecé tocando tetas,
enseguida ella despierta.
Empieza pidiendo auxilio,
pone a todo el mundo alerta.

Llegan corriendo sus padres,
armados con dos cuchillos.
Ella histérica chillando,
y yo solo en calzoncillos.

El padre está como loco,
 no se atiene a razones.
Lo que pretende, es pillarme,
y cortarme los cojones.

La madre más comprensiva,
hace razonar al marido.
Mejor dejarle marchar,
que meternos en un lío.

Ante tal situación,
opte por lo más sencillo.
Cogí la maleta rápida,
y me marché en calzoncillos.

En un parque me vestí,
a las tres de la mañana.
Me acosté en un banco,
el cual me valió de cama.

No se me olvida en la vida,
confusión tan inocente.
Pudo costarme un disgusto,
 ser capado de repente.

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